– Es que vi la serie de Dirty John, y ¡ay!, no sabes qué susto. Es que las mujeres, aunque no lo creas, mientras más envejecen más se alocan con los hombres, por eso hay tanto charlatán suelto.
– Lo que no entiendo, mamá, es porqué YO te tengo preocupada.
– Pues porque es peligroso que andes usando Tinder y esas cosas.
– Mamá, ¡YO NO TENGO TINDER!
– Ay, ¡qué bueno! Haces bien, flaquita, porque es peligroso. Yo también ya cerré el mío.
…mojó los labios en el mezcal y los arqueó en una sonrisa pícara. Había mentido a su madre y no se sentía culpable. Tomó el celular y prendió la yesca con su dedo corazón en un afán de usarlo como la varita mágica que obra milagros y recompone órganos quebrados…pero nada. Solo caras desconocidas, nada cercano, ni cálido, nadie a quién acercarse para intercambiar algo más que fluidos.
Espera! Este por lo menos tiene gracia con esa ocurrencia que escribe: -¿Qué le dice una gallina a otra? -Necesito apoyo. Volvió a curvar los labios ligera pero dulcemente y decidió regalarle a aquel extraño chistoso un pedacito de su tiempo. Y el extrajero fue feliz con aquel regalo breve y buscó la manera de regalarle algo a cambio. Y le quiso regalar su amor, pero ella lo rechazo con suavidad pero firmemente diciendole: – el amor no se regala, se intercambia… Y yo no tengo amor para ti.
…mojó los labios en el mezcal y los arqueó en una sonrisa pícara. Había mentido a su madre y no se sentía culpable. Tomó el celular y prendió la yesca con su dedo corazón en un afán de usarlo como la varita mágica que obra milagros y recompone órganos quebrados…pero nada. Solo caras desconocidas, nada cercano, ni cálido, nadie a quién acercarse para intercambiar algo más que fluidos.
Espera! Este por lo menos tiene gracia con esa ocurrencia que escribe: -¿Qué le dice una gallina a otra? -Necesito apoyo. Volvió a curvar los labios ligera pero dulcemente y decidió regalarle a aquel extraño chistoso un pedacito de su tiempo. Y el extrajero fue feliz con aquel regalo breve y buscó la manera de regalarle algo a cambio. Y le quiso regalar su amor, pero ella lo rechazo con suavidad pero firmemente diciendole: – el amor no se regala, se intercambia… Y yo no tengo amor para ti.
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